Un mes en Egipto
En noviembre del 2012 empecé aquí un viaje de 10 meses dando la vuelta al mundo. Llegué a El Cairo y luego de algunos días en el desierto tomamos un tren para ir al sur. Pasé por Abu Simbel, Asuán y Luxor (y algunos templos en el medio). Los últimos días los dedicamos a la hermosa península del Sinaí, en Dahab.
Lo que tienes que saber
- El Cairo es un completo caos. Por donde lo veas. Es una ciudad llena de historia y con arquitectura muy bonita, pero el tráfico y los muchos egipcios esperándote para comprar licor hacen complicado salir a caminar por El Cairo antiguo.
- El museo egipcio de la capital podría ser espectacular si lo mantuvieran mejor. Tiene mala iluminación, lo que hace difícil leer tu guía o siquiera la explicación escrita que ofrece el museo.
- Las Pirámides de Giza están sobre valoradas. El caos está muy cerca y el tamaño de La Esfinge fue algo decepcionante.
- Egipto no es peligroso. Estuvimos en la plaza Tahrir durante las protestas del 2012 y nunca nos sentimos en peligro.
- El sur y el Sinaí son las partes más bonitas del país.
- Los egipcios se toman muy a pecho las 5 leyes del Corán. Sobre todo la de dar de comer al que tiene hambre y dar cobijo al que tiene frío. Lo digo por experiencia.
- Viajar en bus es incomodo pero funciona. Viajar en tren es mucho más cómodo pero cuesta casi el doble (1era clase).
- Egipto es uno de los países donde más han intentado estafarme. Así que no tengan miedo de reducir cualquier precio hasta la mitad.
- En El Cairo no hagan caso a las tiendas que dicen ser "del gobierno", ninguna lo es. El mejor lugar para comprar papiro y perfumes es en La Souq de la cualquiera de las ciudades principales.
- La velocidad de Internet es muy mala.
- No esperes ir a Egipto de fiesta. Es casi inexistente.
Lo que tienes que hacer
- Snorkeling y Diving. El mar rojo no tiene nada que envidiarle a Tailandia o al caribe. Salvo porque está rodeada por puro desierto. Pero para observar vida marina es uno de los mejores destinos (y más baratos) del mundo.
- Tomar una Felucca y recorrer el Nilo. Sobre todo desde Asuán hacia Luxor. Es una experiencia genial para relajarse y para conocer a los locales, ya que el capitán del velero te contará historias y anécdotas de su vida.
- Alquilar una bicicleta y recorrer los templos en Luxor. Sobre todo a la hora del ocaso. También es buena idea movilizarse en bicicleta a las playas cercanas de Dahab.
- Acompañar a los peregrinos hacia el Monte Sinaí. Estar en la cima viendo el amanecer y escuchar a todos los cristianos y católicos rezar, cantar y hasta hablar en lenguas es una de las experiencias más intensas que he tenido.
Soy una persona de naturaleza y zonas verdes, con mucha flora y fauna, por lo que Egipto no se encuentra entre mis destinos favoritos. Pero hay que reconocer que la cantidad de Templos, la historia y el Sinaí le dan un toque especial. Este es uno de los pocos países en los que puedo decir que un mes es un mucho tiempo. Creo que con algunos días en la capital, otros en el sur y una semana en el Sinaí cubren lo mejor del país.